Con la euforia de una niña en su cumpleaños que no sabe que juguete escoger, caminaba Marta para ver a Juan. Habían quedado en una parada de autobús. Hacía meses que hablaban, pero los kilómetros aún no les habían permitido verse. Cuando Marta llegó a la marquesina acordada, notaba su corazón en las muñecas. Se sentó y comenzó a esperar hasta bien entrada la noche, dejando pasar todos los autobuses que cruzaban por delante, sin saber que en uno de ellos estaría el amor que horas después conoció en el parque mientras se lamentaba.
jueves, 17 de agosto de 2023
(El autobús; Chigüey)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.